jueves, 29 de mayo de 2025

Los datos más recientes del censo de población y vivienda realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indican que, en México 15 millones de mujeres se encuentra en edad reproductiva. A su vez, el Consejo Nacional de Población (CONAPO) señaló que aproximadamente el 17% de esta población es afectada por algún tipo de infertilidad.

La infertilidad es un problema de salud mundial que se caracteriza por la imposibilidad de conseguir un embarazo después de intentarlo por más de un año. Este padecimiento representa un panorama de interés para la salud integral de las mujeres, pues deriva en una situación de alto estrés y es calificado con un impacto emocional elevado. 

“La infecundidad puede presentarse como un duelo incomprendido, invisible y difícil de procesar, ya que a diferencia de otras situaciones, no se expone públicamente por vergüenza o por pena. Las mujeres que lo sufren a menudo sienten una pérdida de control sobre su proyecto de vida biológico, psicológico y colectivo, manifestando tristeza ante la privación de su deseo de maternidad o culpables por no cumplir con el rol familiar designado socioculturalmente”, comentó la Dra. Daniela Chinchilla, vocera de Meraki Health, clínica especializada en fertilidad.

La detección de la depresión en la población de pacientes con infertilidad es importante, ya que por medio de una evaluación exhaustiva es posible identificar acciones adecuadas a seguir con el objetivo de mejorar su calidad de vida, y por medio de los tratamientos adecuados, incrementar la probabilidad de lograr la gestación. 

“El acceso a un adecuado tratamiento impacta en la respuesta psicológica de las mujeres, ya que el trabajo en conjunto de especialistas y equipo multidisciplinario hacen posible un abordaje apropiado para cada necesidad que se presente. Actualmente existen diferentes tratamientos para la infertilidad de la mujer, como la inseminación artificial, la fecundación in vitro (FIV), medicamentos hormonales e incluso seguimientos de carácter natural, los cuales pueden hacer real su deseo de maternidad”, señaló la Dra. Daniela Chinchilla.

La infertilidad hoy día no representa un panorama determinante que imposibilite la procreación en las mujeres. La atención psicológica y el acompañamiento especializado fortalecen los sistemas de apoyo, aminorando el impacto emocional de la infertilidad y permitiendo contar con opciones médicas innovadores que posibilitan la gestación y la concepción de manera saludable.